El cocinero tinerfeño Eduardo Domínguez de León deja el restaurante San Hô, en el que consiguió su primera Estrella Michelin, junto al chef Adrián Bosch Barrera, hace sólo 10 meses. Tras anunciar su salida del establecimiento, ubicado en el hotel Royal Hydeaway Corales, de Adeje, el chef aseguró que se debe a que «esta etapa llega a su fin» y recalcó que su «compromiso y pasión por la cocina permanecen intactos».

Domínguez dice estar deseoso de «enfrentar nuevos desafíos» después de casi tres años muy intensos como uno de los hacedores del éxito de la cocina viajera de San Hô, en la que él y Bosch fusionaron la cocina japonesa con la peruana dándole también un especial protagonismo a la canaria. Con esa filosofía, los tinerfeños crearon una propuesta única que los catapultó al firmamento de la alta cocina a nivel nacional.

Según adelanta a GastroCanarias, su futuro ya está decidido y el nuevo proyecto gastronómico que va a desarrollar se concretará en 2024 y «girará en torno a un concepto muy canario».

Emprender este nuevo camino en solitario obliga a Domínguez, según sus palabras, a «divorciarse» de Bosch, algo que le «cuesta mucho» después de haber compartido con él 14 años de trabajo en los que evolucionaron como profesionales y cultivaron una profunda amistad.

Ambos se conocieron en el hotel Villa Cortés. Allí, el chef ejecutivo, Diego Schattenhofer, fue su gran mentor. El argentino les brindó unas bases sólidas, animándolos a compartir sus ansias insaciables de aprendizaje y de experimentación. Dentro de un ecosistema tan motivador, el talento de ambos no tardó en llamar la atención.

En 2012, un jovencísimo Adrián Bosch se convertía en el Mejor Cocinero de Canarias, tras ganar el Campeonato Absoluto de Cocina de GastroCanarias. En 2016, Eduardo Domínguez conseguía la misma hazaña.

Como un tándem imparable se marcharon a Mallorca, donde pasaron ocho años trabajando en un hotel de la cadena Europe Hotels, a la que pertenece el Villa Cortes.

El podio del 12º Campeonato Absoluto de Cocina de GastroCanarias 2016 con el vencedor, Eduardo Domínguez (c), y Joao Enrique Faraco (i) y Abel Ferrándiz (d), segundo y tercero, respectivamente.

Durante estos años, los cocineros viajan y se nutren de distintas culturas aprendiendo nuevas técnicas, descubriendo ingredientes y las tradiciones de las mejores cocinas del planeta. En 2020 la pandemia cambia repentinamente los planes de todos. Es cuando el Grupo Barceló les propone volver a su Isla para liderar un nuevo restaurante en su resort de lujo del Sur de Tenerife, donde también está ubicado El Rincón de Juan Carlos (dos Estrellas Michelin), un equipo al que Adrián y Eduardo admiran. Los cocineros no lo dudan y se suman de inmediato al proyecto. Lo demás ya es historia.

En las emotivas líneas que Eduardo Domínguez escribió para despedirse de sus compañeros de esta aventura gastronómica, que ha durado 34 meses, afirma: «Seguiré luchando con entusiasmo por lo que el futuro tiene reservado para mí, llevando conmigo las lecciones y los recuerdos que San Hô me ha brindado. Mis palabras son insuficientes para expresar la gratitud que siento por esta experiencia. Cada uno de vosotros ha dejado una huella imborrable en mi corazón y en mi carrera. A medida que avanzamos en direcciones diferentes, mantendré siempre el recuerdo de este tiempo en lo más profundo de mi ser.»

Chaquetilla de Eduardo Domínguez con la dedicatoria de sus compañeros de San Hô.

Tras su marcha de San Hô, Eduardo ha viajado a La Palma, donde tiene raíces familiares, para pasar unos días de descanso y perfilar unas jornadas gastronómicas que quiere «llevar a cada pueblo» en la Isla Bonita. «Soy un enamorado de La Palma y me gustaría recorrerla con una propuesta itinerante de recetas históricas y técnicas ancestrales que forman parte de nuestra historia. Plantear una vuelta a la esencia, a lo salvaje». Entre las técnicas menciona la borrallera palmera, que consiste en cocinar debajo del picón con brasas de sarmientos.

«La idea es cocinar y compartir anécdotas e historias», adelanta el cocinero. Para esta tarea ha contactado con la investigadora y periodista isleña Yanet Acosta, profesora de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid y directora del Master de Comunicación y Periodismo Gastronómico de The Foodie Studies. Ella es una de las responsables del proyecto de recuperación de recetas antiguas de Canarias, cuyo fondo documental se comparte en la web recetascanarias.org.

En paralelo, Domínguez seguirá dedicado a los fermentados, de los que es un gran experto. Prevé organizar nuevos talleres para profesionales y aficionados que deseen adentrarse en esta disciplina con la que tanto éxito tuvo en San Hô y en su proyecto personal de kombucha artesana y ecológica. La exitosa Kombuchacho, que elabora junto con la Finca La Calabacera, no está pasteurizada y se hace a partir de distintos tipos de tés, hierbas y frutas. Hasta ahora han lanzado al mercado dos variedades: Guayabo y lavanda, y Hierba Luisa, kumquat (naranja cherry) y lemon grass. Las puedes disfrutar en las cafeterías de 100×100 Pan, 100×100 Hojaldre, Reliveve y Zulay, y en tiendas ecológicas.