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Trufas y Jareas Santa Cruz y su trocito del norte Un paseo por el Principado de Asturias en Santa Cruz de Tenerife
Asturias es Patrimonio de la UNESCO por muchas cosas y si por algo se caracteriza es por su gente y su gastronomía que son seña de identidad.
Codillo elaborado en el restaurante La Posada en Santa Cruz de Tenerife • Las mejores fabes de Santa Cruz son cocinadas en los fogones de La Posada. Fabada Asturiana o unas fabulosas fabes con almejas, ambas tendrán el mismo efecto en los comensales: Pedir pan y no parar de “sopetear”.
Juan Antonio Hernández Ponce / GastroCanarias
28 diciembre 2016

Al oeste, limitada por la provincia gallega de Lugo, al este por la comunidad cántabra y bañada al norte por el rico y siempre bravo Mar Cantábrico, se encuentra una de las regiones de nuestro país que son patrimonio nacional.

Asturias es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO por su arte prerrománico: la Fuente de la Foncalada, la Cámara Santa de la Catedral de Oviedo, cinco cuevas prehistóricas con arte rupestre y los tramos del Camino de Santiago Primitivo y el Camino de Santiago por la Costa. Pero, además, si por algo es patrimonio, como ocurre siempre en el norte de España, es por saber comer y por su arte culinario.

Asturias es un tesoro del norte. Su gente, siempre amable y servicial, son parte de la riqueza de esta comunidad autónoma y, probablemente uno de los grandes secretos del que todo el que la visita vuelva un poco más enamorado de ella.

Verdes bosques, aguas bravas y ricas en el mejor producto marino, un ganado que nos regala los mejores quesos y sobretodo, una salsa de cariño propia de esta tierra donde las fabes son patrimonio y una religión, son muchas de las virtudes que caracterizan al Principado de Asturias.

Hace unas semanas tuve la posibilidad de trasladarme a Asturias. Tenía una comida que llevaba preparando con mi grupo de amigos ya hace unos meses. Sin embargo, no tuvimos que coger avión ni salir fuera de la isla para caminar por Gijón y la Playa de San Lorenzo hasta llegar al bonito barrio de Cimadevilla, o zigzaguear por las preciosas y señoriales calles del casco antiguo de Oviedo, desde el Teatro Campoamor hasta la catedral, pasando por la Universidad.

Simplemente tuvimos que reunirnos en la C/Méndez Núñez 61, esquina C/San Fernando 7 en Santa Cruz de Tenerife, donde existe un pequeño pedacito de Asturias y en donde su dueña, que parece no existir, pero que siempre está y su equipo, hacen del Restaurante La Posada, la que bajo nuestra humilde opinión es la mejor seña de identidad del Principado de Asturias dentro del territorio chicharrero.

Desde su apertura en el año 1992, no han parado de dar de comer y muy bien a cada comensal que ha pasado por sus mesas. Con un local pequeño, de luz tenue, y lleno de encanto y sabor, la posada nos da la bienvenida con una bodega digna de su categoría. Sus vitrinas guardan en el interior una variedad de caldos difícilmente superable en Santa Cruz de Tenerife.

Desde que uno pone el pie en La Posada, se siente como si estuviera dando una ruta por los Picos de Europa o caminando entre pueblos de costa como Cudillero y tomando un magnífico virrey a la espalda, al que la gran profundidad de las aguas del Cantábrico le dan un sabor único. O, caminando por Cabrales y entrando en una pequeña tasca, para pedir un poco del mejor queso, entero o pisado, acompañado por un pan de pueblo siempre crujiente.

Las mejores fabes de Santa Cruz son cocinadas en los fogones de este pequeño gran restaurante. Fabada Asturiana o unas fabulosas fabes con almejas, ambas tendrán el mismo efecto en los comensales: Pedir pan y no parar de “sopetear”.

No podremos irnos de La Posada, siempre que nuestro estómago tenga un hueco, sin probar su fabuloso codillo que probablemente es el mejor de Santa Cruz o el Cachopo, patrimonio culinario de Asturias.

Unas milhojas de nata con chocolate fundido que las bañe, serán el punto y final para una magnífica y calórica comida propia de la región a la que representan.

Asturias con sus verdes montes, aguas bravas y una gente maravillosa es un lugar donde la comida es cultura y, por suerte en Santa Cruz de Tenerife se puede disfrutar de un pequeño pedacito de aquella tierra.

Hoy le hacemos un homenaje al Norte, a la buena gente y al saber hacer y buen comer. Homenajeamos a Asturias y a su Posada Chicharrera. Un lugar cuya tradición ha sido mantenida desde 1992, año olímpico y se ha mantenido en el podio como lo que es, un gran restaurante de Trufas y Jareas.

2 Responses to Santa Cruz y su trocito del norte

  1. José Ramón dice:

    Tengo que ir sin falta a probar eses fabes! Y otro dia el codillo, y otro el cachopo. Y sidra seguro que habrá.

  2. Jordi dice:

    Desde tierras valencianas y aún no saciado por los abundantes y variados arroces se reaviva la gazuza, ahora por productos asturianos, con la estimulante crónica del amigo Ponce.
    Un fort abrac

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