Bien es cierto que el año 2017 no ha sido el mejor en cuanto a condiciones climatológicas, especialmente si nos situamos en el mundo vitivinícola. A pesar de ello, y con mucho trabajo y dedicación, Bodegas Torres ha cerrado su vendimia 2017 con una calidad excelente.

El cambio climático ha hecho mella en los cultivos, pero, aunque no ha sido un 2017 fácil, las uvas han sido cosechadas en su punto óptimo de calidad y madurez, dando lugar a excelentes vinos aromáticos procedentes de cada una de sus Fincas.

 La vendimia en Penedès, iniciada el 16 de agosto, será recordada por ser una de las más precoces de la historia debido a su campaña marcada por las heladas y las altas temperaturas registradas entre abril y los meses de verano.

En cuanto a la calidad de los vinos, podemos constatar que los blancos presentan una buena intensidad aromática y buen equilibrio en boca con mucha frescura. Los tintos tienen en general un gran nivel y también muestran buena intensidad aromática en nariz y buena estructura en boca, con taninos muy equilibrados.

Bodegas Torres ha querido realizar un recorrido por cada una de sus Fincas para dar a conocer cada detalle de su vendimia 2017.

En Mas La Plana, gracias a la buena madurez de la uva, Bodegas Torres ha obtenido un vino de intensidad colorante elevada y taninos muy redondos y suaves.

Por su parte, Les Arnes ha cultivado la uva tinta destinada al vino Reserva Real. La variedad merlot ha sido la que más ha sufrido las elevadas temperaturas con cierto grado de desecación teniendo que seleccionarla. Los vinos presentan una gran calidad gracias a la buena maduración fenólica y sobre todo a la muy buena acidez. Se tratan de vinos intensos aromáticamente hablando, que destacan por su finura y capacidad de envejecimiento.

Respecto a Fransola, los vinos obtenidos son muy equilibrados en general y poseen una gran intensidad aromática y muy buena acidez en boca. Los vinos tienen aromas de fruta blanca madura, notas de fruta tropical y un punto especiadas. La entrada en boca es fresca y el paso por boca se caracteriza por una evolución con finura y una acidez equilibrada.

En el Priorat, la añada 2017 se ha caracterizado por una maduración precoz y una reducción importante de la cantidad media de producción. los vinos tintos del Priorat de la vendimia 2017 se caracterizan por ser muy limpios en nariz gracias al buen estado sanitario de la uva y con una correcta extracción de polifenoles por la rápida –pero buena– maduración fenólica de las uvas. Intuimos ya vinos con excelente nariz varietal, marcando mucho la tipicidad de la zona, y con una concentración alta pero amable en boca.

Por otra parte, Muralles la escasez de lluvias durante el mes de septiembre y octubre ha beneficiado la maduración lenta de las variedades tardías. En cuanto a la calidad de los vinos, podemos decir que son maduros y fragantes aromáticamente, con buen color y alta concentración, y en general muestran un buen potencial para el envejecimiento.

Asimismo, los vinos de Milmanda son limpios e intensos, con matices herbáceos y cítricos. En boca son ricos y con mucha tensión, gracias a su buen contenido en ácido málico, la cual cosa augura unas buenas fermentaciones malolácticas e integración de la barrica.

Purgatori, sin embargo, se ha caracterizado por su precocidad, por las altas temperaturas y la escasez de lluvia.  La escasez de lluvias durante el mes de septiembre y octubre ha beneficiado la maduración lenta de las variedades tardías, también por unas temperaturas más frescas durante septiembre que han provocado una larga y perfecta maduración. Los vinos elaborados son de muy buena calidad, con buena concentración y alto potencial de envejecimiento.

Bodegas Torres ha cerrado un 2017 con éxito, además, su participación en el programa ambiental Torres&Earth ha supuesto un gran paso para la investigación y el apoyo al desarrollado de tecnología de CCR (Carbon Capture and Reuse).